Por qué un autónomo necesita una estrategia de seguros (no una póliza suelta)
Cuando trabajas por cuenta propia, tu fuente de ingresos depende de ti. Una gripe fuerte, un cliente que te reclama daños, un robo de equipos o un ciberataque pueden frenar tu facturación y comprometer tu patrimonio. La solución no es “tener un seguro”, sino combinar pólizas clave que cubran: tu salud, tus ingresos, tu responsabilidad frente a terceros y tus activos (equipos/local).
Además, ciertos seguros ofrecen ventajas fiscales: por ejemplo, el seguro médico puede ser deducible en IRPF hasta 500 € por persona con requisitos (titularidad, cobertura sanitaria, etc.), y la RC profesional es gasto 100 % afecto si es para la actividad.
CTA: Agenda una consultoría personalizada con Raúl Morales para auditar riesgos por profesión y salir con un plan de coberturas y precio cerrado.
Seguro de salud para autónomos: rapidez y deducción bien aprovechada
Qué cubre y por qué importa: Acceso ágil a especialistas, pruebas y hospitalización para volver antes al trabajo. En entornos con listas de espera, el ahorro de tiempo es dinero (ingresos que no pierdes).
Fiscalidad en dos líneas: en IRPF, hasta 500 € por persona/año (titular, cónyuge, hijos menores de 25 que convivan) pueden ser deducibles si la póliza es por enfermedad/asistencia sanitaria y está a tu nombre.
Checklist express (elige tu perfil):
- Consultor/Tecnología/Marketing: prima media contenida, valora reembolso si viajas.
- Profesiones sanitarias o de campo: mira coberturas de accidentes y pruebas urgentes.
- Comercio/hostelería: busca red amplia y hospitalización.
Tip fiscal: guarda factura y contrato y registra el gasto en tu contabilidad para que compute como deducible.
Seguro de baja laboral (ILT): el “sustituto de ingresos”
Tu problema real: con baja por enfermedad común, la prestación pública suele rondar el 60 % de tu base reguladora (y el 75 % en contingencias profesionales), con carencias y sin cubrir los primeros días según el caso. Un ILT paga una indemnización diaria pactada para que no se caigan tus ingresos.
Cómo configurarlo bien:
- Capital diario alineado a tus gastos fijos (alquiler, cuotas, nóminas).
- Sin franquicia si no puedes permitirte perder los primeros días; con franquicia si quieres bajar prima.
- Coberturas extra: asistencia sanitaria, accidentes in-itínere, hospitalización.
Ejemplo práctico: fotógrafa freelance con temporada de bodas. Una lesión de muñeca = 30 días sin sesiones. Con ILT a 60 €/día, mantiene caja para pagar alquiler de estudio y cuotas, sin tocar ahorros.
Responsabilidad civil profesional (RC): tu escudo frente a reclamaciones
Qué te ahorra: si por tu trabajo un cliente sufre un perjuicio (p. ej., un arquitecto con error de cálculo, un abogado con un plazo mal gestionado), el seguro RC cubre indemnizaciones, defensa jurídica y fianzas. En ciertas actividades y locales, además, es exigida para licencias y convenios.
Claves para elegir:
- RC profesional específica, no una general: cubre el acto profesional (no solo daños materiales).
- Suma asegurada acorde a tu ticket medio y riesgo (empieza en 150.000–300.000 € y escala según sector).
- Retroactividad y post-vigencia si entregas proyectos que pueden dar problemas meses después.
Caso tipo: diseñadora web con caída de e-commerce en rebajas. La RC gestiona defensa y posibles daños económicos reclamados por el cliente.
Multirriesgo (local/estudio/comercio): protege el lugar y lo que hay dentro
Si trabajas en un local u ofreces atención al público, el seguro multirriesgo cubre incendio, robo, agua, rotura de cristales, equipos, daños por fenómenos atmosféricos y responsabilidad de explotación. Algunas pólizas incorporan pérdida de beneficios si debes cerrar temporalmente por siniestro (clave para no parar caja).
Puntos finos:
- Declara bien continente (inmueble) y contenido (mobiliario, equipos, mercancía).
- Valora pérdida de beneficios con período de indemnización de 3–6 meses.
- Si alquilas, revisa cláusulas de contrato sobre quién asegura qué.

Equipos y portátiles: continuidad para oficios “todo-digital”
Para freelance de diseño, vídeo, programación, marketing, tu equipo es tu negocio. Existen pólizas para daños accidentales, robo dentro/fuera del local, avería y en muchas, equipos en movilidad (coworkings, clientes, desplazamientos).
Checklist: valor de reposición, franquicia razonable, extensión a periféricos y almacenamiento de datos (servicios de recuperación).
Ciberseguro y protección de datos: pequeños, pero objetivo
España está entre los países con más ciberataques a empresas; un ransomware puede pararte días. El ciberseguro aporta respuesta a incidentes (forense, legal, PR), restauración de datos, extorsión y a veces formación. Útil si gestionas datos de clientes o vendes online. Añade defensa por RGPD/AEPD si tratas datos sensibles. (Los competidores lo tratan como “recomendable” y creciente.
¿Qué seguros son obligatorios (de verdad)?
- RC del local si tienes apertura/licencia y según actividad.
- Vehículo si usas coche/furgoneta para trabajar (obligatorio en España).
- Seguro por convenio si tienes empleados (depende del convenio).
- Otros casos sectoriales (colegiados, sanitarios, instaladores): la autoridad o colegio puede exigir RC profesional específica.
Nota fiscal útil: RC profesional y multirriesgo del local son gastos afectos a la actividad. El seguro médico tiene límites específicos en IRPF (500 € por persona). Guarda facturas y registra el gasto correctamente.
¿Cómo elegir bien (y no pagar de más)?
- Mapa de riesgo por profesión. Lista tus escenarios: reclamaciones de clientes, baja de 30–60 días, dependencia de equipo/estudio, venta online, etc.
- Suma asegurada y franquicia alineadas a tu realidad (ticket medio, caja, tolerancia al riesgo).
- Condiciones clave: retroactividad/descubrimiento en RC, carencias en ILT, exclusiones en ciber (BYOD, phishing), sublímites en equipos.
- Paquetes y descuentos. Combinar salud + ILT + RC + multirriesgo suele optimizar prima.
- Revisión anual. Si subes precios o cambias de actividad, ajusta sumas y coberturas.
CTA central: Pide tu consultoría personalizada con Raúl Morales. En 30–45 min, revisamos actividad, riesgos y presupuesto, y te proponemos un pack a medida con comparación de aseguradoras.
Mini-guías por profesión (atajos)
- Diseño/marketing/programación: Salud + ILT + RC profesional (errores/omisiones) + ciber + equipos en movilidad.
- Arquitectura/ingeniería: RC profesional alta + retroactividad, multirriesgo de estudio, ILT sin franquicia en temporada de entregas.
- Sanitarios/fisioterapia: RC sanitaria específica, salud premium, ILT reforzada, protección de datos (historias clínicas).
- Comercio/hostelería: Multirriesgo con pérdida de beneficios, RC de explotación, ILT con franquicia corta, salud para reducir bajas.
- Fotografía/vídeo/eventos: Equipos + ILT por picos de temporada, RC por localizaciones, ciber básico (copias y recuperación).
Ser autónomo es gestionar ingresos y riesgos al mismo tiempo. Un paquete inteligente —salud + ILT + RC + multirriesgo + (equipos/ciber)— protege tu renta y tu patrimonio. La diferencia está en el ajuste fino por actividad y presupuesto.
Siguiente paso: Reserva tu consultoría personalizada con Raúl Morales. Te llevas un plan comparado por aseguradora, coberturas claras y precio optimizado.
Preguntas frecuentes sobre seguros para autónomos (FAQ)
¿Qué seguro es el primero que debería contratar un autónomo?
Si atiendes a público o entregas proyectos a clientes, comienza por RC profesional y, si tienes local, multirriesgo. Si tus ingresos dependen de ti al 100 %, prioriza ILT para sustituir renta en bajas.
¿El seguro médico desgrava en el IRPF?
Sí, con límites: hasta 500 € por persona/año (titular, cónyuge e hijos menores de 25 que convivan), cumpliendo requisitos y con póliza a tu nombre.
¿La RC profesional es obligatoria para todas las profesiones?
No. Es obligatoria según actividad y normativa (colegios/autoridades) y si tienes local, la RC asociada a la apertura suele exigirse. Aun cuando no lo sea, es muy recomendable.
Trabajo desde casa: ¿puedo deducir el seguro del hogar?
Solo el porcentaje afecto comunicado a Hacienda cuando te diste de alta (si afecta a la actividad). Para el local físico, el multirriesgo es 100 % afecto.
¿Cómo estimo la indemnización diaria del ILT?
Suma tus gastos fijos mensuales (cuota, alquiler, suministros, nóminas) y divídelos entre 30. Añade un 10–20 % de colchón si tienes picos de actividad.




0 comentarios